Смекни!
smekni.com

Доисторическая Иберия (стр. 2 из 3)

La pintura levantina es característica del Neolítico peninsular. Está localizada en abrigos rocosos de las sierras interiores, normalmente al descubierto, y que representa escenas de grupos, con mucho dinamismo y con figuras humanas estilizadas, reflejo de un mayor grado de esquematización y abstracción que la pintura cantábrica del Magdaleniense.

4. Эпоха металлов

Медный век (халколит, энеолит)

El empleo de los metales supone un gran avance en el marco cultural, en el ocaso de la época neolítica. La utilización del cobre da nombre a la primera fase de la llamada Edad de los Metales: el Calcolítico o la Edad del Cobre.

Al Calcolítico se asocian dos culturas en la Península. Entre los años 2.500 y el 1.800 a. C. surge en la zona murciana y almeriense la культура Лос-Мильярес, nombre del principal yacimiento. Pertenecía a una sociedad densamente poblada, con una agricultura de regadío más desarrollada. En el poblado se pueden observar inmensas murallas y otras obras de fortificación.

Otra cultura dentro de la Edad del Cobre es la культура колоколовидных кубков, существовавшая в период 2200—1700 гг. до н. э., cuya principal característica es su distribución por toda Europa. Hay una gran presencia de cuencos y vasijas cerámicas con la forma de campana invertida y una serie de objetos de ajuar de cobre en tumbas que evidencian la existencia de élites sociales diferenciadas por su nivel de riquezas. Se han encontrado restos en la desembocadura del río Tajo, en Portugal, Cataluña, Madrid (Ciempozuelos) y el Guadalquivir.

En el centro peninsular hallamos también la cultura de Las Motillas, elevaciones defensivas situadas en el entorno del Guadiana.

Sin embargo, el fenómeno cultural de más importancia es el de los мегалиты. Son grandes enterramientos colectivos, también comunes en el resto de Europa y que aparecieron en la zona atlántica, relacionados con el desarrollo de las creencias religiosas. Los monumentos son muy diversos, desde el dolmen hasta las tumbas de corredor, construidas con enormes piedras y techadas posteriormente con una gran losa plana, aunque a veces preferían elementos más pequeños. Se encuentran por todo el territorio peninsular, pero los más significativos se sitúan en Andalucía oriental. Tienen su origen en el Neolítico, a comienzos del cuarto milenio y se prolonga hasta mediados del tercero, ya en la Edad del Bronce.

También comenzó el desarrollo de la талайотская культура hacia el año 2.000 a. C. en las Islas Baleares. Su nombre deriva de las grandes torres defensivas, troncocónicas y construidas con enormes piedras en torno las cuales se establecían los poblados. Además, había otro tipo de monumentos llamados taulas, que al parecer eran altares de sacrificio situados al aire libre, de tres o cuatro metros de altura, de las que se conservan una treintena en Менорка. El tercer tipo de monumento caracterizado por su vastedad era la naveta, edificio rectangular terminado en ábside y construido con grandes bloques de piedra, que servía como lugar de enterramiento colectivo.

4.2. Бронзовый век

· Основные культуры бронзового века Иберии. Зелёный — Монтелавар, жёлтый — Коготас I, оранжевый — Мотильяс и бронза Леванте, красный — Аргар, розовый — Юго-западная бронза Иберии (горизонт Аталайя), синий — Вила-Нова-де-Сан-Педру. С севера (Аквитания) к культурам Иберии примыкал Артенак

· Carte de la péninsule ibérique à l'âge du bronze tardif montrant l'expansion des différentes cultures. Les points montrent des vestiges isolés de ces cultures, hors de leur zone principale

Los intercambios en el mediterráneo aproximan los descubrimientos desde oriente a occidente y a la inversa. En Almería, Granada y Murcia se desarrolla la cultura de El Argar. La ciudades fortificadas son de planta rectangular, más grandes, y a su alrededor se desarrolla una importante agricultura y ganadería junto a la industria metalúrgica donde desempeñan un papel fundamental el cobre, la plata, el oro y las distintas aleaciones que dan lugar, por ejemplo, al estaño y al bronce. Aparece el poder político superior a los clanes y familias, y cambia de manera brusca la organización social. Aquí se fija la aparición de una vida urbana en un sentido más próximo a nuestros días. El control de las materias primas es elemento constitutivo de castas.

Аргарская культура tiene intensos contactos, hacia el Guadiana, con otras vecinas y coetáneas como la Cultura del Bronce Manchego, en Albacete y Ciudad Real. En un principio se creyó que no era más que una expresión diferente de la cultura argárica, resultante de su expansión hacia el interior; pero actualmente se tiende a caracterizarla como horizonte cultural diferenciado aunque con fuertes relaciones con el Argar y el Bronce Valenciano. Los asentamientos de esta cultura suelen ser numerosos y, aunque dispersos y extensivos dentro de un territorio, mantienen relaciones entre sí creando agrupaciones de asentamientos. Los caracterizados como morras (en Albacete) y motillas (en Ciudad Real), fortalezas circulares dispuestas en anillos concéntricos en torno a una gran torre central, constituyen lugares de habitación sin parangón en el resto de la Península. Son propios de esta cultura otros tipos de asentamientos como los castellones, los asentamientos en cuevas o los llamados de fondos de cabaña. Incluso existen algunos muy singulares, como el crannog (especie de palafito) de El Acequión, que sugieren una gran versatilidad de esta Cultura para adaptarse a las condiciones de habitabilidad más dispares desarrollando diferentes soluciones. Constituye uno de los substratos culturales indígenas sobre los que, posteriormente, se desarrolló la Cultura Ibera. La red de relaciones y comunicaciones, creada por estos pueblos entre sí, se va a mantener casi intacta hasta época romana.

Los contactos de la Аргарская культура также простирались до Гвадалквивира, где позднее возник Тартесс. Проникновение через Пиренеи других культур постоянно продолжалось в течение многих столетий. Влияние этих миграций было большим во внутренней части и на севере полуострова, que todavía no tiene el desarrollo de la zona meridional. Los nuevos pobladores son diestros en la explotación y fabricación de instrumentos de hierro. Las oleadas de inmigrantes se acercan por dos puntos: por las actuales Navarra y País Vasco por un lado, y por la zona oriental hasta Cataluña por otro. Traen mejores técnicas agrícolas y ocupan los espacios de la Meseta que son los que menos población tienen en esos momentos. Usaron los yacimientos de hierro del norte de España, y aplicaron la cultura cerealista y una ganadería extensiva. Siendo dominantes en el centro y parte noroccidental de España, lograron finalmente ser la clase dirigente en la zona de norte del Mediterráneo español, mientras que las culturas del sur y del sureste permanecieron más ajenas.

Hacia el final de este periodo (1200—1000 a. C.) se extienden desde el otro lado de los Pirineos los primeros asentamientos de la культура полей погребальных урн.

4.3. Железный век

La Edad del Hierro transcurre desde el año 800 a. C. hasta aproximadamente el comienzo de la conquista romana de Hispania, en el 218 a. C. Esta es la última etapa prehistórica que, en el territorio peninsular, coincide con la colonización de los pueblos mediterráneos (fenicios, griegos y cartagineses) y de los pueblos del norte de Europa (los celtas).

En el transcurso de esta etapa, se mezclan los rasgos autóctonos de las culturas indígenas con la influencia cultural llegada del exterior. Generalmente, no existe una gran discontinuidad entre las culturas del Bronce y las del Hierro; los restos arqueológicos nos hacen pensar en una paulatina evolución, y solamente las aportaciones tecnológicas y culturales externas provocaron una progresiva diferenciación entre los pueblos mediterráneos, mucho más avanzados, y las culturas del interior.

Los orígenes de la metalurgia del hierro no son claros. Como en el caso del bronce, hubo una elaboración rudimentaria de hierro meteórico, a la que posteriormente siguió la del mineral de hierro propiamente dicho, que debió de aparecer a mediados del II milenio adC en Asia Anterior, aunque otros estudiosos se decantan más por África. De una manera práctica, el hierro no comenzó a trabajarse hasta el año 1.200 a. C., y durante siglos todavía compartió con el bronce (a veces más estimado) la primacía de material para la fabricación de armas, útiles y adornos.

La metalurgia del hierro tardó mucho tiempo en descubrirse, pues aunque la materia abundaba en muchas zonas, la elevada temperatura a la que se funde (unos 800°C) determinó que sólo la casualidad hiciera posible el hallazgo. Primeramente se tostaba en fuego de carbón y luego se fundía en un pozo en el que habían colocado capas alternas de carbón vegetal y hierro a las que se prendía fuego avivado mediante fuelles. Se conseguían así lingotes de hierro puro que, tras un nuevo calentamiento, eran golpeados con martillo para separar la escoria y darles la forma deseada. Lamentablemente, este método no podía proporcionar armas ni objetos tan eficaces como los de bronce. Solo una verdadera especialización hizo factible la mejora de la metalurgia del hierro y su predominio sobre los antiguos artículos de bronce.

En la Península es prácticamente imposible precisar la entrada del nuevo metal, principalmente porque durante algunos siglos coexistió con el bronce. Es posible que lo trajesen los fenicios al establecerse en la península hacia el año 1.000 a. C., o bien los griegos, que fundaron su primera colonia en este país, probablemente Rhodes (Rosas, Gerona), en el siglo VIII a. C. Tampoco hay que olvidar que a partir del 900 a. C. comenzaron las oleadas célticas en la península, cuyo metal ya conocían, además de ir armados con espadas, lanzas, escudos y cascos del mismo.

5. Население

Aunque al menos desde época neolítica ya existían unos elementos básicos de la población peninsular, la falta de referencias a aquellos periodos imposibilita darles nombres. Hay que aclarar que, aunque algunas culturas conocían la escritura, estas aún se consideran parte de la Prehistoria de España.

5.1. Тартесс

Tartessos es la cultura más antigua del primer milenio adC. Sus límites geográficos se situaban entre el sur de Portugal y la desembocadura del Río Segura. Parece que tenía dos centros de irradiación política y cultural diferentes, uno al Oeste situado en el valle del Guadalquivir, y otro al este, en la ciudad de Mastia Tarseion, presumiblemente Cartagena.

Lo poco que se conoce con certeza es debido a las fuentes griegas y romanas, así como algunos hallazgos arqueológicos que no guardan apenas relación con los testimonios escritos. Alcanzaron cierta importancia, en un principio a través de una economía ganadera y agraria y más adelante mediante la explotación de las minas de la región. El auge de esta cultura tuvo lugar entre los siglos IX y VII a. C., coincidiendo con la etapa en que los fenicios se asentaron en factorías costeras para la adquisición de metales a cambio de productos elaborados que eran adquiridos por la élite tartésica.

Estos intercambios contribuyeron al desarrollo de la sociedad autóctona. Modificaron los ritos funerarios tartésicos y, probablemente, acentuaron la estratificación social. Hay pruebas que indican que la aristocracia tartésica explotó a la población que trabajaba en las minas y en los campos en su propio beneficio.

A partir del siglo VI a. C., Tartessos entra en una etapa de decadencia. El motivo más plausible, aunque aún muy controvertido, es el agotamiento de las vetas de mineral aprovechables, que habría acabado con el comercio colonial fenicio y habría llevado a las culturas nativas de nuevo a una economía exclusivamente agrícola y ganadera.

5.2. Иберы

Los iberos se extendieron por toda el área levantina, desde los Pirineos hasta es:Gades (Cádiz), aunque su zona de influencia abarcaba una importante franja interior, desde el valle del Ebro hasta el valle del Guadalquivir. Fue una cultura homogénea, con influencias de los griegos y cartagineses. Sus rasgos básicos, sin embargo, proceden de una evolución autóctona de los pueblos del Bronce: poblados fortificados de tamaño variable, desde ciudades a aldeas, a menudo en colinas y elevaciones de terreno, vivían de una economía agrícola y ganadera, aunque también del comercio con productos artesanales y minerales que intercambiaban con los comerciantes extranjeros.

В период V-III вв. до н.э. los distintos pueblos iberos adquirieron grados de desarrollo social y político diversos. La mayor parte estaban dirigidos por una aristocracia que controlaba la producción del campesinado e imponía su dominio mediante la fuerza militar: los ajuares funerarios, cargados de armas (la famosa falcata ibérica) y de imágenes que enardecían los valores guerreros, así nos lo demuestran. En ciertos pueblos hubo líderes, quizá cercanos a la figura de un rey. La conquista de cartagineses y romanos impidió su desarrollo y sometió a todos ellos al dominio externo.

En el ámbito cultural, eran pueblos avanzados, con una lengua propia aún sin descifrar, ritos religiosos y funerarios característicos y, en determinadas ciudades, un cierto desarrollo de la planificación urbana. De las muestras artísticas que se conservan, destacan una serie de esculturas, entre las que destacan la es:Dama de Elche, la de Baza, la del Cerro de los Santos o la llamada es:Bicha de Balazote.

5.3. Кельтское население Иберии

Los celtíberos son, en realidad, un conjunto de pueblos que habitaban ambas mesetas cuando se produjo la conquista romana. Sus orígenes son inciertos, con restos arqueológicos muy dispares y en ocasiones confusos. Eran pueblos con una economía agraria, más bien pobre, que se agrupaban en confederaciones de tipo tribal y con grupos aristocráticos. Se establecían en poblados pequeños pero muy bien fortificados, poseían una metalurgia del hierro avanzada y una artesanía textil muy apreciada por los antiguos romanos.

A pesar de la apariencia defensiva que presentaban sus asentamientos (por ejemplo, los castros gallegos), no hay ninguna prueba concluyente que apoye la idea de que hayan sido pueblos organizadamente beligerantes. Desde los lusitanos, en el centro del actual Portugal, a los vascones, en Navarra, pasando por los galaicos, astures y cántabros, que personifican la influencia del mundo atlántico del Hierro en la Península.

6. Колонисты

Las colonizaciones en la Península Ibérica se limitaron, fundamentalmente, a pequeños asentamientos muy escasos y breves. Los pueblos que llevaron a cabo la empresa, fenicios, griegos y cartagineses, dieron mayor importancia a comerciar y asegurarse el control de las riquezas mineras para sus metrópolis, que de asentarse de una forma estable en el territorio peninsular.

6.1. Финикийцы

Появление культур на востоке полуострова совпадает с распространением финикийского влияния на всё Средиземноморье в период до 12 века до н.э. Присутствие финикийцев ограничилось побережьем Andalucía и ограниченной зоной внутреннего влияния, что ассоциируется с поселением Tartessos. Финикийцам приписывают основание Гадеса (современный Кадис - Cádiz), что же касается даты его основания, она несколько спорная: греческие и римские источники относят его к 1100 году до н.э. Указанный город стал основным центром торговли финикийцев с Тартессом. Хотя есть и более старые объекты, финикийские поселения встречаются на побережье Малаги и Гранады начиная с siglo VIII a. C. (8 века до н.э.). Это были коммерческие предприятия для налаживания постоянной торговли с центрами производства металлов в глубине полуострова, хотя также возможно, что у них была самодостаточная аграрная экономика. Вероятно, они были теми, кто ввёл в употребление производство железа, достаточно сложное, и гончарный круг.