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Мовна специфіка літературних творів доби Золотого Віку (стр. 11 из 13)

A menudo se usa también ei sinónimo de este verbo “pensar”: Pienso que Celia es un gran casamiento, porque es muy rica y hermosa y de claro entendimiento. Agora pienso que Celia te adora. Por dicha piensan los señores que en Saboya merezco sus favores.

Otro verbo con el mismo significado es “opinar”: Opino que porque quien a muchas quiere a nadie puede querer. Opino que el Amor pisa las estampas de los celos. Opino que la Naturaleza es hermosa por ser varia.

A este grupo de verbos se puede atribuir también la expresión “cobrar fama”: Tú cobras fama de la mejor romancera del mundo. Por fin llegó a la ciudad que cobraba fama de la capital de pícaros sucios y gordos, vistosos oracioneros, esportilleros y mandilejos de la hampa.

En cuanto a nivel sintáctico se puede decir que, analizado el léxico de las obras del Siglo del Oro, se observa que el subjetivismo muy frecuentamente se expresa en las oraciones exclamativas: ¡Ahora sí es la risica!¡Ay, que bien haya esa gracia! ¡Ay, qué copete que tiene tan lindo y rizado! ¡Ay, qué blancura de dientes! ¡Mal año para piñones mondados que más blancos ni más lindos sean! ¡Ay, que ojos tan grandes y tan rasgados! ¡Y por el siglo mi madre que son verdes, que no parecen sino que son de esmeraldas!¡Extraño y triste espectáculo para losa padres, que a su querida hija y su amado yerno miraban! ¡Mal haya yo si más quiero que jures, pues con sólo lo jurado podías entrar en la misma sima de Cabra! ¡Notable error!¡Gran ruido!¡Todo el mundo no es bastante!¡Qué dicha tendré si es ella! ¡Extraña gente!¡Lástima me da! ¡Lástima es que esta mozuela sea gitana!

DAMA1: ¡Oh, qué gracioso entremés!

DAMA2: ¡Qué bien Amarilis habla!

DAMA1: ¡Qué bien se viste y se toca!

MARTÍN: (Aparte a JUAN.) ¡Buen mozo!

JUAN: (Aparte a MARTÍN.) ¡Buen talle!

INÉS: (Aparte a CELIA.) ¡Bravas plumas!

CELIA: (Aparte a INÉS.) ¡Bizarría tiene el belicoso traje!

MÚSICO1: ¿ Qué guitarra habéis traído?

MÚSICO2: La sonora portuguesa.

MÚSICO1: ¡Buenas voces!

MÚSICO2: ¡Extremadas!

Gran número de las oraciones exclamativas evaluativas se empiezan con la conjunción “que”: ¡Oué liviandad! ¡Qué traición! ¡Qué soldado tan galán! ¡Qué libertad tan grosera!¡Oh qué donaire tan grande!¡Qué bien tocada venís! ¡Qué amor tan necio y cansado! ¡Qué descompuesta porfía! ¡Qué humildad! ¡Qué presto tras ellos viene! ¡Qué discreto fuego tiene para abrasar necios hielos! ¡Qué mal hace quien se atreve a dar por amor desdén, porque no es hombre de bien quien no paga lo que debe!¡Ay, Martín, qué necio he sido! ¡Qué desgraciado y perdido!

Un lunar tienes, ¡Qué lindo!

¡Ay Jesús, qué luna clara!

¡Oué sol, que allá en los antípodas

oscuros valles aclara!

Más de dos ciegos por verle

Dieran más de cuatro blancas...

Se encuentran también muchas oraciones que empiezan con el adjetivo “bravo”: ¡Brava vitoria, don Juan! ¡Brava arrogancia! ¡Bravo talle!¡Brava joya te ha enviado!

Otro elemento de intensificación aparece “éste sí que”: ¡Éste sí que se puede decir cabello de oro! ¡Éstos sí que son ojos de esmeralda!¡Éste sí que es juramento para enternecer las piedras!

CONCLUSIONES

Siglo de Oro es la época clásica o de apogeo de la cultura española desde la publicación de la Gramática castellana de Antonio de Nebrija (1492) hasta la muerte de Calderón (1681). El punto más alto de este apogeo se encuentra en la obra de Miguel de Cervantes y Lope de Vega.

Fue un período de gran florecimiento político y económico en España, que alcanzó un gran renombre y prestigio internacional; durante esta época todo lo “nuevo” en Europa venía de España y era imitado con gusto y aplicación; se puso de moda saber la lengua española. Se desarrollan en especial la literatura, las artes plásticas y la música. El Siglo de Oro abarca dos periodos estéticos, que corresponden al Renacimiento durante el siglo XVI y al Barroco durante el siglo.

Axiologia, llamada también teoría de los valores, abarca, por una parte, el conjunto de ciencias normativas y, por otra, la crítica a la noción de valor en general.

Subjetivamente, el valor es el carácter que reviste una cosa al ser más o menos apreciada. Objetivamente, es el carácter de las cosas que merecen mayor o menor aprecio o que satisfacen cierto fin.

Valer y ser no se identifican en el proceso de la percepción humana. Percibimos muchas cosas que son, pero no por ello juzgamos que valen, más aún, nos dejan indiferentes. El valor es aquello que saca al sujeto de su indiferencia frente al objeto; por eso, el valor se funda en la preferibilidad. La noindiferencia es la esencia del valor. Tener valor no significa directamente tener más o menos realidad, sino no ser indiferente. Es precisamente esta característica del valor lo que va a plantear el problema central de la axiologia.

El valor es captado sentimentalmente. No se percibe el valor por la vía de un silogismo deductivo, sino de una manera inmediata en la que la capacidad de sentir de la persona se ve afectada. Hay un «orden del corazón» paralelo al «orden de la razón». El percibir sentimental no está unido exteriormente al objeto, ni aun de modo mediato a través de una representación o a través de un signo, como si el objeto fuera signo de algo más profundo.

EI valor es objetivo. El mismo hecho de que podamos discutir sobre los valores, supone que en la base de la discusión estamos profundamente convencidos de que son objetivos. Los valores se descubren, como se descubren también las verdades científicas.

Los valores son esencias o eidos. Quiere esto decir que los valores son independientes de las experiencias en que están inmersos. Esta esencia puede ser realizada por medio de la existencia, pero su modo específico de consistencia no se modifica por el modificarse de sus realizaciones existenciales.

Los valores son esencias «eternas e inmensas», por abarcar el espacio y el tiempo. Además son esencias «absolutas e inmutables»: los valores no cambian y no están condicionados por ningún hecho de naturaleza histórica, social, biológica o individual. Lo que vale una vez, vale siempre y de un modo uniforme: no valdrá más para unos que para otros.

El valor no es una relación, sino una cualidad. Es preciso distinguir entre el valor en sí y el valor para nosotros. Si hubiera valor sólo para algunos, entonces estarían constitutivamente en relación con el tiempo y con el espacio, cosa que ya hemos excluido.

La característica más importante de evaluación es la presensia de factor subjetivo que actúa reciprocamente con el objetivo. Una expresión evaluativa, aun si no se ve claramente el sujeto, sobreentiede la relación evaluativa entre sujeto y objeto. El aspecto evaluativo, como uno de los elementos de la estructura evaluativa, tienen los predicados axiológicos. Los predicados creer, opinar, pensar, parecer reflejan el caracter subjetivo de evaluación.

El componente subjetivo presupone la actitud positiva o negativa de sujeto hacia su objeto (a veces la representan en forma de relacion: gustar/no gustar, apreciar/no apreciar, aprobar/no aprobar) mientras el componente objetivo (descriptivo) toma como punto de referencia las cualidades propias de objetos o fenomenos a base de las cuales se evaluan.

P.Nowel-Smit divide los adjetivos en 2 grupos: grupo A (aptness-words) y grupo D (descriptive words). Los primeros indican que el objeto tiene unos rasgos que son aptos para despertar emociones y los segundos entran en descripción.

J. fon Wright propuso una clasificación de tipos de evaluación basada en tipos de objetos y semántica de combinaciones con la palabra "bueno". Él distingue las siguientes "formas de bienes": bien instrumental, bien técnico, bienes médicos, bien utilitar, bien gedónico, bienes de hombre.

Arutyunova divide los significados de evaluación parcial en 3 grupos que incluyen 7 categorías. El primer grupo lo forman las evaluaciones de sensor que se dividen en: gedonísticas, sicológicas entre las cuales se diferencian evaluaciones intelectuales (interesante, trivial, fascinante) y evaluaciones emocionales (alegre, deseado, agradable).El segundo grupo son evaluaciones sublimadas o absolutas: 1) evaluaciones estéticas basadas en síntesis de las de sensor y sicológicas; 2) éticas que sobreentienden las normas: moral, bondadoso, vicioso.

Las últimas 3 categorías que constituyen el tercer grupo son evaluaciones racionalísticas vinculadas con actividad práctica de hombre. Incluyen las evaluaciones 1) utilitares (útil, nocivo); 2) normativas (correcto, normal, sano); 3) teleológicas (eficaz, acertado, defectuoso).

En las estructuras evaluativas los rasgos subjetivo y objetivo actúan recíprocamente. Se distinguen la evaluación general que se basa en los rasgos que les atribuye el sujeto y los de evaluación parcial que tiene como punto de partida las características propias de objetos.

Los componentes objetivo y subjetivo de significado evaluativo representan una unidad dialéctica con correlaciones muy complicadas en límites de cada serie de unidades de la lengua.

Las relaciones entre el sentido descriptivo y evaluativo (emotivo) se manifiestan evidentemente en sistema de los adjetivos para los cuales es esencial la semántica de signo. Entre los adjetivos se puede diferenciar las palabras descriptivas que no contienen ninguna evaluación (por ejemplo, portugués, cúprico, matinal, bípedo etc), a este tipo pertenece la mayoría de adjetivos relativos y los evaluativos propiamente dichos (bueno, excelente, magnífico, estupendo, malo, feo, terrible) que designan sólo la evaluación con signo "+" ("bueno") o "-" ("malo") con diferente grado de intencificación y afectividad.

En mayoría de los casos el significado evaluativo se vincula implicativamente con el descriptivo correspondiente. En la lengua natural los dos aspectos se combinan. La combinación se realiza así en la semántica de las palabras evaluativas como en declaraciones que contienen una evaluación, y precisamente en las declaraciones se descubre una serie de rasgos de semántica evaluativa.

Los dos componentes de significado (descriptivo y evaluativo) se puede distinguirlos describiendo la semántica de declaraciones y palabras concretas.

La evaluación es inseparable de la comparación. Cualquier tipo de comparación se basa en disjunción que presupone incompatibilidad de unas situaciones, acciones, modos de actuar, acontecimientos. La relación disjuntiva, es decir, presencia de una opción dentro de una serie de alternativas, incita a uno a hacer una comparación evaluativa. La evaluación comparativa tiene forma de un razonamiento práctico (que no lleva a la constatación de la verdad sino a la toma de decisión). El razonamiento lógico es universal para toda la gente y se basa en distracción del sujeto pensador. El razonamiento práctico al revés no puede ser aislado de la estructura de la personalidad, las finalidades que se propone, de la real situación de la vida.

Los objetos de la comparación evaluativa pueden ser tanto cosas como sus cualidades, situaciones, acontecimientos y estados. Pero cuando hablan de las preferencias, no tienen en cuenta los objetos propiamente dichos sino sus propiedades y las acciones que los incorporan.

El complejo semántico “bueno – malo” pertenece a las concepciones de graduación, en la cual cada antónimo muestra la dirección de la escala que se extiende a dos infinidades opuestas divididas por el eje de simetría.

Los rasgos marcados por los antónimos representan dos lados de una medalle. La aumentación de un rasgo en la escala de lo bueno y lo malo se vuelve la disminución del otro.

La evaluación puede referirse a los acontecimientos pasados, al futuro y a las situaciones abstractas. La evaluación comparativa de lo pasado o de lo existente ya no puede tener fuerza comunicativa que actuve activamente. No obstante está vinculada con determinadas situaciones e impulsos sicológicos.

La investigación del léxico de evaluación subjetiva en obras de Cervantes, Quevedo, Gracián, Lope de Vega y Calderón de la Barca llevaron a la conclusión que existe gran número de medios de evaluación. Lo subjetivo se manifiesta a través del uso de tropos, palabras con el matiz evaluativo “bien”, “mal” y sus derivados “bueno”, “malo”, “mejor”, “peor”, palabras “más”, “menos”, adjetivos, incluyendo los usados en grado comparativo y superlativo, verbos “parecer”, “tener por”, “creer” y otros.


РЕЗЮМЕ

Останнім часом лінгвістична наука все частіше звертається до проблеми особистості в мові. Праці сучасних дослідників характеризуються антропоцентричним підходом до аналізу художнього тексту: текст розглядається як відображення ідейно-естетичної та ціннісної концепції автора. Принципового значення набуває прагматичний ракурс дослідження творів. Мовні засоби вираження суб’єктивної оцінки є найважливішим способом реалізації образу автора. Особливості індивідуального стилю автора дають ключ до розуміння його концептуальної картини світу.

У своїй магістерській роботі ми розглядаємо поняття аксиології – науки про цінності, досліджуємо категорію оцінки, в першу чергу, оцінки суб’ктивної, аналізуємо лексику творів іспанських авторів доби Золотого Віку. Актуальність даного дослідження визначається необхідністю подальшого вивчення мовної специфіки літературних творів доби Золотого Віку.

Магістерська робота складається зі вступу, п’яти розділів та висновків. Обсяг роботи складає 92 сторінки. У списку використаної літератури нараховується 60 джерел, у тому числі 10 – іспанською мовою. Практична частина розроблена на матеріалі творів М.Севантеса „Циганочка”, „Рінконете і Кортадильо”, „Ліценціат Відрьєра”, „Ревнивий екстремадурець”, „Славетна судомийка”, „Мрії” Кеведо, „Мистецтво винахідливості” Грасіана, „Правда, що в коханні...” Лопе де Вега, „Життя є сон” Кальдерона де ла Барка.

Перший розділ має на меті зробити загальний огляд доби Золотого Віку, епохи, що вважається апогеєм розвитку іспанської культури. Це період найбільшого політичного та економічного розквіту Іспанії, коли країна набула загального міжнародного визнання. В цей час стає модною іспанська мова, особливого розвитку набуває література, музика та образотворче мистецтво. Що стосується літератури, у добу Золотого Віку жили і творили такі визначні письменники і поети як Мігель де Сервантес Сааведра, Кеведо, Грасіан, Тирсо де Моліна, Лопе де Вега, Лопе де Руеда, Педро Кальдерон де ла Барка та інші. Із них найбільший внесок в іспанську та світову літературу зробили, без сумніву, Сервантес та Лопе де Вега. „Дон Кіхот” Сервантесастав одним із найбільш відомих у світі романів, а „лицар печального образу” – одним із найпопулярніших і найулюбленіших образів сьогодення. Лопе де Вега - це геніальний драматург та поет, автор численних драм та комедій, серед яких найбільш відомою для українських читачів є „Кам’яний гість”.